domingo, 3 de noviembre de 2019

La victoria del Siglo (4)

Mucho se ha hablado del día en que se ganó a Siglo XXI, y muchas referencias en el presente blog han mencionado aquella victoria. Sin embargo, no son tantos los recuerdos que se conservan de aquel 13 de abril, en el colegio Madre de Dios. He aquí algunos de ellos:
 
"Algún contrario o compañero que te llamara la atención en aquel partido?"
Patxi: "Creo que sobre todo fue una gran labor de equipo, un logro conjunto. Todo el equipo estuvo metido, fuera defendiendo o animando y apoyando desde el banco. Creo que para todos (sin duda, para mí lo fue) ese día fue una catarsis, una redención, una explosión que dejó atrás los fantasmas de tantas derrotas (la última tan sangrante...) y frustraciones. Como gritó Michel aquel día: -¡Nos lo merecíamos!- Pero, además, sobre todo, nos lo ganamos, a pulso."
Carlos: "Un tal Manu, y servidor, nos comimos a sus pívots. Jugamos todo el partido de pívot los dos (y así nos fue, ja ja)."
 
"¿Cómo celebraste la victoria?"
Patxi: "Fue una enorme, gigantesca, descomunal explosión interior de satisfacción, de rabia y frustración vencidas y dejadas atrás... Pero no llegó casi a ser expresada porque unos segundos después Álvaro, que estaba en la grada con la afición, salta al campo, se me echa encima y me da un abrazo fortísimo. Nos felicitamos todos, enormes sonrisas en todas las caras... Nunca hemos sido más equipo, más grupo unido que en ese momento de premio al trabajo duro conjunto, a la fe y la determinación de ganar a mejores, más guapos y jóvenes y, sin embargo, aquel día, mucho menos equipo que PARQUE.
En lo personal, Felicidad. Sí, sabía jugar a aquello todavía, estaba aún en condiciones de plantar cara y ganar a Cualquiera, si creía en ello, si luchaba lo necesario. Aquella fue mi despedida al baloncesto, al jugado al nivel que yo me exigía para disfrutarlo. El último gran partido. La última gran, gran Victoria."
  
Equipo de la victoria del Siglo
 
 
Nessun dorma
 
 

1 comentario:

  1. Carlos: "Un tal Manu, y servidor, nos comimos a sus pívots"
    Entre pan y pan, añado. Y a tiempo para ir a tomar el aperitivo.

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