El campo de Madre de Dios (7)

Tras un tiempo jugando en la ikastola Begoñazpi, no nos gustó la subida del precio del alquiler, y sobre todo, que no nos informasen previamente. Así que decidimos volver a jugar en el colegio Madre de Dios. Y en este segundo ciclo tuvieron lugar algunos de los mejores momentos de nuestra historia.

Nos reestrenamos en este campo un 14 de diciembre de 2002, con una victoria frente a Zornotza. Desde entonces, hasta final de temporada, tuvimos un balance en el colegio de 9 victorias y 3 derrotas, si bien en uno de los triunfos, aunque jugamos en este colegio, era el equipo rival el que ejercía como local, y nosotros como visitantes...

Jugamos en Madre de Dios durante otros tres cursos, aunque con menos éxito que en ese año de nuestra vuelta. Así, en 2003-04, los cinco primeros partidos en el colegio fueron sendas derrotas, y la primera victoria llegó por incomparecencia del rival, Ruperto Medina. En total, un balance de 3 victorias y 11 derrotas en la segunda temporada de este nuevo ciclo en el colegio, que era la de nuestra vuelta a la categoría Preferente, tras el ascenso de la temporada anterior.

Y si mala fue esa temporada, durante la cual superamos nuestro récord negativo de derrotas consecutivas (9), en la siguiente dejamos dicho récord en 10 derrotas seguidas; que aunque parezca increíble, en futuras temporadas sería igualado. Y si, a pesar de todo, en la temporada anterior no habíamos descendido de categoría, tanto fue el cántaro a la fuente, que en aquella 2004-05 sí se produjo el descenso. No obstante, nuestro balance en el colegio había sido algo mejor: 5 victorias y 9 derrotas.

 

Nuestro último curso en el colegio Madre de Dios, el 2005-06, fue un poco mejor que los dos anteriores, terminando con un balance de 4 victorias y 5 derrotas, en los partidos en el colegio. Y en aquella temporada, desde el encuentro (y victoria) ante Bar Ambigú, el 20 de noviembre, cambiamos nuestro día de juego. Desde entonces nuestros partidos en casa se han jugado habitualmente los domingos por la tarde, ya fuesen en Madre de Dios, en el colegio Salesianos, o actualmente, en Zurbaranbarri.

Nuestro último partido en Madre de Dios, como equipo local (dos años después volvimos, como visitante, para jugar un amistoso), fue el 2 de abril de 2006, y terminó en derrota contra Águilas Salde (74-81, aunque el anotador nos apuntó en el acta, erróneamente, un punto de más). En aquel encuentro resultó lesionado Asier, en una de las continuas acciones de "contactos" del equipo visitante, en la que ni tan siquiera fue señalada una falta personal. Se trasladó a un centro médico, con lo que el equipo quedó con 4 jugadores durante unos minutos (se menciona en Con cinco basta (1)). Además, Manu se despidió del colegio con una nueva actuación para recordar: 35 puntos, con 13 canastas de dos, y un montón de rebotes, aunque estos no aparecieron en la estadística.

En esa temporada 2005-06, además, jugamos dos partidos como equipo local en el colegio Salesianos de Barakaldo, al que nos trasladaríamos el curso siguiente; el de nuestro 10º aniversario. Para efectuar dicho traslado nos convenció el nuevo precio del alquiler, la calidad de su pabellón, así como poder evitar tanto cambio de horario de nuestros partidos, que habíamos padecido en Madre de Dios durante los últimos años. Sin embargo, dejar este colegio no fue fácil, puesto que habíamos vivido ocho temporadas de alegrías y decepciones, junto con un grupo de gente que pasó por el club, o que aún sigue en él. Fueron años de muchas derrotas, mas también de grandes victorias, como aquel inolvidable "ascenso del siglo"...